30 de agosto de 2006

La Globofobia


Justo cuando pensaba que no podía haber una fobia peor que la mía conocí a dos globofóbicos.

Todo comenzó cuando nos sentamos con un amigo a conversar de ese dolor de cabeza que todos tenemos a ratos por cosas que no soportamos y nos toca enfrentar...hay fobias definitivamente paralizantes como la agarofobia o miedo a los espacios abiertos o la claustrofobia (miedo a espacios cerrados) y hay otras más comunes como la aracnofobia y el miedo a volar. Sin embargo el relato que les contaré les producirá asombro porque probablemente estemos frente a un nuevo descubrimiento: la globofobia.

Hace unos cuantos años, para una fiesta de aniversario del colegio tuvimos una situación extraña y sorprendente entre manos cuando una de nuestras compañeras, de hecho mi compañera de asiento, lanzó un grito aterrador cuando alguien ingresó a la sala cargando un montón de globos que usaríamos para una de nuestras "performance"...le cayó una araña encima, está practicando para nuestra presentación del video de Michael Jackson "Thriller" fueron las teorías que pasaron por mi cabeza, pero su palidez no desapareció y entonces dijo en voz baja "..,los globos, le tengo miedo a los globos"...el estupor reinó y "la de los despreciables causantes de fobia" tuvo que sacarlos para que la cara de Matilde cambiara en un segundo. De ahí en adelante no se entregaba a ella ninguna tarea relacionada a globos, ni inflarlos ni trasladarlos y nos alejábamos en actitud solidaria cuándo la amenaza estaba cerca de ella.

Y justo hace unos días, hablando con mi amigo, que no quizo que revelara su identidad para esta nota, me confesó que también él tenía un rollo con los globos: "no es que no me gusten, simplemente no los soporto y lo peor es que no puedo estar cerca de ellos ni reventarlos, están ahí y yo tengo que alejarlos", relata con molestia. "De hecho cuando era pequeño e iba a un cumpleaños me las arreglaba para hacerles un pequeño hoyito para que se desinflaran de a poco y hace unos meses mi señora me pidió que llevara unos globos inflados a la casa después de una fiesta de cumpleaños y no llegaron a destino: los heché del auto y quedaron vagando en la calle...ni siquiera me importó contaminar".

En lo personal hay un rollo con la mermelada, manjar o cualquier cosa dulce que pueda tener contacto con mi piel, la sensación de repugnancia es indescriptible, aunque puedo disfrutar esos productos con una "fiel cuchara". La aracnofobia ya es algo asumido en mí. Pero la globofobia, sin duda me sorprende mucho porque estos adminículos llenos de algún gas son la cosa más inerte y menos peligrosa que existe.

Sin duda, la medicina aún no ha podido dilucidar la gran cantidad de fobias existentes, porque de seguro las hay en variedad similar a la cantidad de habitantes del mundo. ¿El Observatodo ha descubierto una nueva enfermedad? Sólo el tiempo nos dará la respuesta.

0 reflexiones: